Historia de Fe y de Lucha de una mujer inmigrante: Marcela Chavarria, Luchando contra el cáncer agarrada de las manos de Dios.

Marcela Chavarría, es una inmigrante que vive en Bacliff, Texas.  Es una joven madre originaria de San Luis Potosí. Compartió con Marianas de San Pablo su experiencia de fe al mismo tiempo que ha estado luchando contra el cáncer desde hace dos años. Marcela tiene cáncer en etapa 5 desde mayo 14 del 2012, es feligrés de la iglesia de San Pablo Apóstol de Nassau Bay, TX.

El cáncer no avisa, es sorpresivo y Marcela comento que siempre acudía a los
exámenes de cáncer de mama, excepto un año que no lo hizo.
A los cuarenta años se detecto una bolita en la mama y acudió al examen, aunque
podían operarle únicamente la extracción de la bolita, decidió le quitaran la mama,
pero la removerla el cáncer se recorrió hacia sus huesos y hace unos meses
que se ha extendido a los pulmones. “Pero eso no me afecta, estoy bien hago mi vida
normal, camino, como muy bien, si siento cansancio y me fatigo, pero en si, estoy bien
agrego. “La felicidad es una actitud, que nadie te la da ni te la quita, ya la tienes, pero
te ocupas tanto en buscarla, que no hay tiempo para reconocerla.

Marcela aprendió a superar esta experiencia porque además de su gran fe en Dios,
quien le ha dado todo, tiene el amor de su actual esposo Juancho, quien tiene catorce
años de vivir con ella y ha demostrado su compromiso por ella. Como muestra del gran
cariño, su pareja, al año de conocer su diagnóstico, se casó con ella. Esta es una historia de
amor incondicional,  del amor de la familia hacia Marcela, del amor entregado de su esposo, el amor tierno de sus hijos, el amor fraterno de sus hermanos, el amor espiritual de sus amigos de la iglesia, y el amor infinito de su mamá, pero sobre todo el amor de Dios.

Marcela es una Mujer fuerte, ha salido adelante con sus hijos siempre y aprendió a superar y vivir su estado de salud.

Desde el inicio de la entrevista, Marcela emitió siempre esa felicidad de vivir
la vida que Dios le permite disfrutar con todos sus seres amados, como hijos,
hermanos y amigos.
En su voz y palabras expresa la entereza y determinación que tiene por compartir con
las personas que le escuchen y visiten. Ella tiene una actitud de crecimiento, estabilidad
emocional y gran espiritualidad.

Venciendo el cáncer: apostar a la vida, cuando el diagnostico medico es cáncer, quien
lo recibe no puede escuchar absolutamente mas nada, el shock emocional que se
produce como consecuencia, de la asociación que se hace de esta enfermedad con la
muerte, es inevitable. A partir de esto, el paciente oncológico cae en un estado crítico de terror, de
desesperanza.

Al preguntarle acerca de su niñez, en su voz emitió la sensación de añoranza mezclada
con un tristeza, pero dijo: “ Todo lo que he vivido no lo cambiaría, si tuviera que volverlo
a vivir.  Mi madre emigro a los E.E.U.U. y me quede con mi tía y papá, el tomaba
mucho, pero aun y con su problema él me inculco la fe en Dios y aunque tenia muchas
carencias era feliz con mis primos con quienes conviví mi niñez y después emigré a
Houston para reunirme con mi Madre y hermanos.

Para Marcela el momento o la prueba más difícil que ha tenido no ha sido el cáncer
sino la deportación de su hijo mayor Jonathan, que fue deportado en enero del 2014. “Estuvo
detenido en migración y lo regresaron a México, pero Dios me ayudo a superarlo y
aceptar que se tenía que ir.”
Ella ha puesto su fortaleza y su fe en Dios. “Estoy convencida que lo que Dios tiene
para mi al final es muy hermoso, no es porque yo me quiera morir, no, yo solamente
creo en la voluntad de mi Dios padre.”

¿Qué es lo que te mantiene fuerte ahora? ¿Cuál crees que es tu propósito en esta
vida?
“Me mantiene en esta vida el amor a mis hijos, mi situación ha contribuido a que mi familia se una, porque estaban muy distanciados, aunque no aceptan la realidad de mi salud.”

“Mi hijo menor Alberto, de quince años ha mostrado un ejemplo de madurez y ha podido
superar esto emocionalmente, porque encontré la manera de platicárselo y le he ayudado a
entenderlo, para que así no le afecte. No sucede lo mismo con mi hermano
Alejandro, todos evaden la palabra cáncer y ponen en su mente que es una gripa,  cualquier
cosa, pero menos esta enfermedad.”

Tienen miedo de enfrentar la realidad,  que en cualquier momento ya no estaré con ellos, y mi
madre también quien es una mujer con mucha entereza, no lo acepta tampoco.

Quiero compartir con el mundo o con mis seres queridos: les digo que nunca dejen de
luchar por la vida, no importan las circunstancias en que estén, que no pierdan nunca la
fe en Dios que es el único que nos levanta día a día, seguir siempre adelante, con una
sonrisa, reír, gozar, como si fuera el ultimo instante de nuestra vida.

No perder los quince minutos de vida, en resentimientos y discusiones que es lo peor
que se puede hacer, mantenerse siempre en pie, si te caíste, levántate, sacúdete y
sigue adelante.

NO EXISTE UN PRINCIPIO. SOLAMENTE EXISTE UNA INFINITA PASIÓN POR LA
VIDA.

Le agradecemos a Marcela,  por su valentía y accesibilidad para conceder a MARIANAS la primer entrevista de "Historias de fe y de lucha de una mujer Hispana".  Este es un nuevo proyecto de MARIANAS que esperemos se expanda a todas las comunidades católicas de mujeres hispanas.  La misión de este proyecto, es publicar la historia de mujeres hispanas católicas, que tengan una historia diaria de lucha y de superación en su pequeña comunidad:  madres de familia, esposas, trabajadoras, inmigrantes y sobre todo, mujeres que utilizan su fe para guiar su vida diaria.

MARIANAS de San Pablo, creemos que no solo las personas de alto perfil, artistas famosos o personajes famosos, pueden aparecer en una portada o ser entrevistados por un periódico u otro medio de comunicación.  También las mujeres hispanas con vidas cotidianas, pueden aportar a una historia para inspirar a su comunidad y sembrar un granito de esperanza y de fe a otras mujeres que se pueden identificar con ellas.

Marcela nos ha recibido en su humilde casa con mucho amor y con todas las atenciones, a pesar de su cansancio y su condición física.  Es una mujer que inspira por tres características:  su humildad, su gran fe en Dios y sus ganas de seguir luchando a pesar de las adversidades.  Adicionalmente, Marcela es una persona que transmite alegría, optimismo y mucho carisma.  Es un ejemplo de vivir una adversidad de la manera mas positiva.  Gracias Marcela por ser un ejemplo de vida y por poner en perspectiva la vida de muchas mujeres. Que Dios te bendiga a ti y a tu familia.

Edicion: Maria Luisa Flores, Dorothy Ruiz-Martinez
Reportaje:  Por Hermelinda Vasquez